MACSCHINE MACHIN - El grafitti en general es una forma de expresión invasiva, azarosa y rica en matices que manifiestan una condición social basada en la identidad. Surge de manera disruptiva en el espacio urbano como una declaración muchas veces vandálica y que está asociada con una condición socioeconómica que surge del pueblo y en específico de grupos marginales, que muchas veces por medio de pintas, frases o slogans expresan su malestar o inconformidad de manera concreta o abstracta sobre inequidades e injusticias.

 

Por otro lado, los vehículos de lujo deportivos son una manifestación opuesta a aquella, y emblemática del exceso, la abundancia, la opulencia y los avances tecnológicos a los que solo pueden acceder unas minorías muy privilegiadas.

 

Como cruce arbitrario de esas manifestaciones surgió este proyecto, por un lado como una reflexión sobre la desproporción económica que puede darse a causa de la corrupción de algunos políticos en México. Tal y como sucedió en el caso específico de Genaro Garcia Luna, quien durante el gobierno de Felipe Calderón amasó una fortuna extraordinaria como secretario de seguridad pública del estado mexicano. Quien motivado por la ambición desmedida y por la facilidad para manipular los recursos públicos se hizo de una colección de varios automóviles de lujo cuyos costos millonarios resultan indignantes en todos los sentidos. Indignación que bien podría manifestarse convirtiendo esos vehículos en una extensión del espacio físico del pueblo ideal para la expresión de males y malestares a través del grafitti.  La alegoría es caprichosa, y el problema tiene aristas complejas que habría que considerar, por ejemplo:  México como país dependiente y sujeto a una hegemonía tecnológica, no ha conseguido posicionarse como productor de vehículos automotores. Situación que manifiesta paradojas históricas que hacen evidente y a la vez chocante la pésima y extrema distribución de la riqueza. Solo hay que tener en mente que en el país hay 46 millones de personas viviendo en la pobreza. 

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Esta es una selección de algunos autos que compró Garcia Luna, entre otros que pertenecieron a los expresidentes: Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, y a Raúl Salinas de Gortari ( hermano del expresidente Carlos Salinas ). Los ejemplos de vehículos de lujo que tienen los servidores públicos son muchos... 

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MACSCHINE MACHIN - Graffiti in general is a form of invasive, random expression rich in nuances that manifest a social condition based on identity. It emerges in a disruptive way in the urban space as a declaration that is often vandalistic and that is associated with a socioeconomic condition that arises from the people and specifically from marginal groups, which often through paintings, phrases or slogans express their discomfort or dissatisfaction with concrete or abstract way about inequalities and injustices.

 

On the other hand, luxury sports vehicles are an opposite manifestation of that, and emblematic of excess, abundance, opulence and technological advances that only very privileged minorities can access.

 

As an arbitrary intersection of these demonstrations, this project emerged, on the one hand as a reflection on the economic disproportion that can occur due to the corruption of some politicians in Mexico. As happened in the specific case of Genaro Garcia Luna, who during the government of Felipe Calderón amassed an extraordinary fortune as secretary of public security of the Mexican state. Whoever, motivated by excessive ambition and the ease of manipulating public resources, acquired a collection of several luxury automobiles whose million-dollar costs are outrageous in every sense. Outrage that could well manifest itself by converting these vehicles into an extension of the physical space of the town, ideal for the expression of evils and discomfort through graffiti. The allegory is capricious, and the problem has complex edges that must be considered, for example:  Mexico, as a dependent country and subject to technological hegemony, has not managed to position itself as a producer of motor vehicles. A situation that manifests historical paradoxes that make evident and at the same time shocking the terrible and extreme distribution of wealth. You just have to keep in mind that there are 46 million people living in poverty in the country.

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This is a selection of some cars that Garcia Luna bought, among others that belonged to former presidents: Felipe Calderón and Enrique Peña Nieto, and Raúl Salinas de Gortari (brother of former president Carlos Salinas). The examples of luxury vehicles that public servants have are many...

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